Tiger Woods, uno de los mejores golfistas de todos los tiempos, no sólo es conocido por su éxito sin parangón, sino también por un largo y a menudo doloroso historial de lesiones que pusieron a prueba una y otra vez su carrera. El hecho de que, a pesar de todo, celebrara remontadas una y otra vez y ganara un total de 15 majors es poco menos que un milagro. Desde los primeros problemas de rodilla y una pierna rota, con los que Woods consiguió ganar un Major, hasta el terrible accidente de coche en el que el jugador de 49 años casi pierde la pierna, lea aquí las lesiones a veces graves que sufrió Tiger Woods.
Al principio de su carrera se hizo evidente que la rodilla de Woods sería un punto débil. La primera operación conocida tuvo lugar en diciembre de 1994, cuando le extirparon quistes benignos y tejido cicatricial de la rodilla izquierda cuando era un estudiante de 18 años de la Universidad de Stanford. Como entonces aún era amateur, esta intervención temprana no tuvo ninguna repercusión en su carrera profesional, pero presagiaba problemas futuros.
Después de hacer historia en el golf con el "Tiger Slam" en 2001, Woods tuvo que someterse a otra operación en la rodilla izquierda en diciembre de 2002 para drenar líquido del ligamento cruzado anterior y extirpar más quistes. Esto ocurrió en la cima de su dominio, poco después de ganar el Masters y el US Open. La operación le obligó a no participar en la temporada de 2003 y a tomarse un descanso de 10 semanas. Pero Tiger Woods regresó rápido y victorioso, un patrón que se repetiría muchas veces en su carrera.
Incluso en sus mejores años, Woods no se libró del todo. A partir de septiembre de 2006, se vio acosado por dolores y pequeñas lesiones. Cabe destacar que durante esta etapa, una de las más exitosas, se limitó a jugar a pesar del dolor e incluso ganó un torneo en los antiguos Campeonatos Mundiales de Golf. Esto demostró su inmensa fuerza mental y la voluntad de ganar a pesar de sus limitaciones físicas.
Un acontecimiento dramático fue la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda en julio de 2007, que Woods sufrió tras el Open Championship. En un principio decidió no operarse y siguió jugando al más alto nivel, ganando incluso cinco de los seis torneos siguientes, incluido el Campeonato de la PGA. Sin embargo, el verdadero alcance de la lesión se hizo evidente al año siguiente.
En abril de 2008, Woods se sometió a una operación artroscópica en la rodilla izquierda para reparar los daños en el cartílago. Esta operación tuvo lugar poco después de su segundo puesto en el Masters y le obligó a tomarse un descanso forzoso de dos meses. Pero la odisea de su rodilla aún no había terminado: En mayo de 2008 se le diagnosticaron dos fracturas de estrés en la tibia izquierda. A pesar del dolor y en contra de los consejos médicos, Woods participó en el Abierto de Estados Unidos y ganó el torneo en un desempate contra Rocco Mediate, una victoria que todavía se considera uno de los mayores triunfos de su carrera. Ocho días después de esta legendaria victoria, en junio de 2008, tuvo que someterse a una operación en la rodilla izquierda. Esto le obligó a no jugar el resto de la temporada 2008 y le llevó a una larga fase de recuperación.
Los primeros años de la década de 2010 se caracterizaron por problemas recurrentes. En abril de 2011, Woods sufrió un esguince del ligamento interno de la rodilla izquierda y una distensión del tendón de Aquiles izquierdo. Esto le obligó a perderse el Players Championship, el US Open y el Open Championship y le llevó a un parón de un mes. El tendón de Aquiles seguiría acosándole; en marzo de 2012, otro episodio de dolor en el tendón de Aquiles le obligó a retirarse del WGC-Cadillac Championship, pero solo dos semanas después ganó el Arnold Palmer Invitational. En junio de 2013, sufrió una distensión en el codo izquierdo. Woods se retiró del AT&T National y se tomó alrededor de un mes de descanso, pero regresó a tiempo para el Open Championship.
En 2014 comenzó un nuevo y largo capítulo en su historial de lesiones: los problemas de espalda. En marzo de 2014, Woods se sometió a su primera operación de espalda (una microdiscectomía) debido a un pinzamiento nervioso. Este fue el comienzo de una odisea que tendría un impacto duradero en su carrera. Tuvo que retirarse del Honda Classic y del Arnold Palmer Invitational y se perdió el Masters por primera vez en su carrera. Esto marcó el comienzo de una larga pausa en el golf.
Los problemas de espalda continuaron: Dos microdiscectomías más en su espalda siguieron en septiembre y octubre de 2015 para eliminar fragmentos de disco. Estas operaciones le obligaron a perderse el resto de la temporada de 2015 y también el Masters de 2016, un periodo caracterizado por la incertidumbre sobre si podría volver a jugar al máximo nivel.
En abril de 2017, Woods se sometió a una fusión espinal en la zona lumbar, su cuarta operación de espalda. Esta operación se consideró el último recurso y muchos la vieron como el posible final de su carrera. Se retiró del Dubai Desert Classic y se perdió los grandes torneos de la primavera. No participó en ninguno de los grandes torneos de 2016 y 2017.
Tras una temporada 2018 sin apenas lesiones, que culminó con una emotiva victoria en el Tour Championship, Woods volvió a la senda del triunfo en 2019. Apenas unos meses después, ganó el Masters, uno de los mayores regresos de la historia del deporte. En agosto de 2019, se sometió a una cirugía artroscópica en la rodilla izquierda para reparar un daño menor en el cartílago, de la que se recuperó relativamente rápido.
El año 2021 comenzó con otra operación de espalda. En enero de 2021, Woods se sometió a su quinta microdiscectomía. Se suponía que esto le dejaría fuera de juego durante la temporada 2021, pero sólo unas semanas después, en febrero de 2021, sufrió un grave accidente de coche que volvió a poner su carrera al borde del abismo. Woods sufrió múltiples fracturas en la pierna, el pie y el tobillo derechos, por lo que tuvo que ser operado de urgencia. Woods estuvo a punto de perder la pierna en este accidente; según los médicos que le trataron en aquel momento, la amputación era una posibilidad. Desde entonces, su mayor problema ya no es la espalda, sino la movilidad. En algunas apariciones en el Tour desde entonces, Woods ha subrayado que caminar es la mayor dificultad para su maltrecho cuerpo.
Su regreso fue difícil. En abril de 2022 participó en el Masters e incluso pasó el corte. Sin embargo, poco después, en el PGA Championship, tuvo que retirarse del torneo por problemas físicos. En abril de 2023, los continuos problemas le llevaron a operarse del tobillo derecho para tratar la artritis postraumática, una consecuencia a largo plazo de su accidente de coche. Esta operación supuso otro parón de diez meses.
Incluso en 2024 y 2025, nuevas lesiones siguieron afectando a su calendario de torneos. En septiembre de 2024, se anunció que se había sometido a una sexta operación de espalda (microcompresión de la columna lumbar) debido a una compresión nerviosa. Y en marzo de 2025, se anunció que había sufrido otra rotura del tendón de Aquiles izquierdo, que requirió cirugía y puso fin a su temporada de 2025. Al menos, Woods pudo jugar partidos de exhibición en la liga "TGL" fundada por él y Rory McIlroy entre enero y marzo, y volver a presentarse ante los aficionados al golf en el campo (virtual). No es imposible que vuelva a jugar regularmente por trofeos y títulos, pero debido a su larga lista de lesiones es difícil de imaginar. Por otro lado, Woods ha conseguido sorprender a menudo al mundo del golf con remontadas gracias a su mentalidad, dedicación y pasión.
29 May 2025
Tiger Woods sufrió a menudo dolores y lesiones graves durante su carrera, que le obligaron a someterse a numerosas operaciones. (Foto: Imago)